Dijo el rabí Moshé de Kobryn:
— Cuando pronunciéis una palabra ante Dios, entrad en esa palabra con todos los miembros.
Entonces, uno de los oyentes preguntó:
— ¿Cómo es posible que un ser humano quepa en una palabra?
— Cualquiera que se sienta más grande que una palabra —repuso el rabí— no es la clase de persona de la cual estamos hablando.
Cuento de la tradición jasídica.
sábado, 9 de enero de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario