El pintor japonés Hokusai tenía más de setenta años cuando empezó a crear su colección de imágenes del monte Fuji. Al fin de esa serie, incluyó su famosa declaración: “Desde la edad de seis años tuve la manía de dibujar la forma de los objetos. A los cincuenta años había publicado infinidad de dibujos, pero todo lo que produje antes de los setenta no vale nada. A los setenta y tres aprendí un poco acerca de la verdadera estructura de la naturaleza. Cuando tenga ochenta, habré progresado aún más; a los noventa penetraré en el misterio de las cosas y, cuando tenga ciento diez, todo lo que haga, ya sea un punto o una línea, estará vivo".
Cuento de origen desconocido.
sábado, 12 de marzo de 2011
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