Se cuenta que un joven discípulo de Baba Charkhi estaba sentado en el vestíbulo de su casa cuando llegó un hombre y le dijo:
— ¿Quién eres tú?
El discípulo respondió:
— Soy un seguidor de Baba Charkhi.
El hombre preguntó:
— ¿Cómo puede Charkhi tener seguidores? Soy su tío, y si los hubiera tenido, yo lo habría sabido. Me temo que estás mal informado sobre su condición de maestro.
Después de este episodio, el tío de Charkhi se quedó en la casa muchos años, hasta su muerte y nunca creyó que su sobrino era un maestro sufí. "Lo conozco desde que era un niño", decía, "y no puedo creer que enseñe nada, porque siempre fue incapaz de aprender nada".
Incluso después de la muerte de Charkhi, muchas personas seguían sin creer que hubiera sido un santo.
Yunus Abus-Aswad Kamali, el teólogo, hablaba en nombre de éstas cuando dijo:
— Traté a Charkhi durante treinta años y jamás habló conmigo de asuntos elevados. Nunca trató de explicarme sus teorías ni intentó hacerme su discípulo. Me enteré de su supuesta condición de sufí a través del carnicero.
Cuento de la tradición sufí.
lunes, 8 de marzo de 2010
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