— El hombre —enseñó el Maestro— es un ser débil.
— Ser débil —propagó el apóstol— es ser un cómplice.
— Ser cómplice —sentenció el Gran Inquisidor— es ser un criminal.
Cuento de Marco Denevi.
jueves, 25 de marzo de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario