Un día, un joven budista que regresaba a su casa llegó a la orilla de un ancho río. Mientras miraba el gran obstáculo que se extendía ante él, buscó en vano la forma de cruzar. Cuando estaba a punto de darse por vencido, vio a un gran maestro en la orilla opuesta y le gritó:
— Oh sabio, ¿puedes decirme cómo llegar al otro lado del río?
El maestro reflexionó un momento y le dijo:
— Hijo mío, estás en el otro lado.
Cuento de la tradición budista zen.
miércoles, 15 de diciembre de 2010
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