domingo, 22 de mayo de 2011

Amenaza

Cierta vez, el mullah Nasrudín llegó a una aldea gritando furiosamente:
—¡He perdido mi alforja! ¡Daos prisa a buscarla, de lo contrario, haré con esta aldea lo mismo que hice con la otra!

Los aldeanos, asustados, corrieron por todas partes para buscar la alforja, hasta que uno la encontró.
—¿Qué habrías hecho —le preguntaron después al mullah—, si no la hubiéramos encontrado?
—Bueno —repuso Nasrudín sonriendo—, habría dejado vuestra aldea y me hubiera ido a otra a buscarla.

Cuento de la tradición sufí.

No hay comentarios: